Habíamos dejado las casas que fueron del matrimonio Juan Pinto de Heredia y Juana Suárez, destinadas a la fundación de un convento, en este caso de monjas dominicas, en manos de un clérigo, influyente y relevante en la sociedad local de la época, Francisco Suárez. A todo este proceso de compra-venta le dedicamos el artículo anterior. Sigamos desenrollando la madeja sobre los primeros edificios del convento carmelita de Villalba del Alcor.

Y los años van pasando
Han pasado los años desde la adquisición de las casas que fueron de tan señalado matrimonio. Y ha llegado el momento en el que os planteo un ejercicio en el que jugaremos a imaginar, a recrear las pequeñas piezas que componen el puzle de nuestra historia.
Dejemos volar la imaginación y seamos testigos de una escena que marcó el destino de nuestro actual convento carmelita…
Estamos en Villalba. Un amanecer frío. Quedan apenas unos días para que el año fenezca, el año de Nuestro Señor Jesucristo de 1614.
Me los imagino en torno a una mesa, al fondo la chimenea crepitando; caras serias, por el frío que desde hace días azota estas tierras y, sobre todo, por el asunto que tienen entre manos. Presidiendo la escena el anfitrión. Para nosotros no es el primer fundador de convento en este lugar pero sí el más reconocible, el más notorio. Un clérigo que si pasará a la historia, García Jiménez Franco. Allí están todos, reunidos en su casa junto a la iglesia parroquial, en una reunión en la que se están poniendo las bases de lo que será el futuro convento carmelita de Villalba del Alcor.
Una agradable reunión de negocios
Uno de los participantes en esa reunión es otro clérigo, un tal Francisco Suárez de Encalada, otro presbítero y beneficiado de Villalba. Es sin duda un personaje imprescindible en esta historia porque es uno de los herederos de aquel clérigo, Francisco Suárez, que compró las casas del matrimonio Pinto-Suárez. En este caso su herencia, como sobrino que es del señor Suárez, está formada por estas casas precisamente.
Por tanto, a día de hoy, en 1614, tras la muerte de su tío, es el propietario de estas casas como heredero que soy del beneficiado Francisco Suárez, presbítero, mi tío, difunto, beneficiado que fue de la dicha iglesia de San Bartolomé desta villa; nombrado por él en su testamento so cuya disposición falleció.
Y, en esos momentos, allí vive y disfruta de su propiedad.
A lo que vamos, ¿qué se trata aquí? Pues nada más y nada menos que un intercambio, un trueque entre ambos clérigos, un acuerdo que pondrá las bases de lo que será el futuro convento carmelita de Villalba del Alcor.
Yo te doy
Veamos cuáles son las bases de ese intercambio, ese trueque como ellos lo llaman:
Otorgamos las dichas partes (los dos clérigos herederos) que hacemos TRUEQUE E CAMBIO e promutaciones a saber: yo el dicho beneficiado Francisco Suárez de Encalada a el dicho beneficiado García Ximénez Franco de unas casas principales que tienen su recebimiento, patio, piezas bajas y altas, corrales con todo lo que les pertenece, con dos casas pequeñas asesorias a ellas, que todas son en esta villa de Villalba en la calle Real della, que las principales son de mi morada y las otras dos pequeñas son las unas en que a el presente vive un pastelero y en las otras Lorenzo Martín, hortelano, que lindan unas con otras e con casas de Antón Benítez e la calleja que dicen del Monje; las cuales dichas casas habiendo sido convento de monjas y después siendo casas de morada de personas particulares el doctor Juan Pérez Manuel del Consejo de su Majestad e su alcalde en la Real Audiencia e Chancillería de la ciudad de Granada, como patrono del patronazgo e obras pías que en esta villa de Villalba fundaron de sus bienes Juan Pinto de Heredia e doña Juana Suárez, su mujer, difuntos, suyas fueron las dichas casas y en nombre del dicho patronazgo e de sus sucesores en él; en virtud de la licencia que para ello tuvo del licenciado don Felipe de Haro, provisor e vicario general en la ciudad de Sevilla e su arzobispado, ansimismo en virtud de otras diligencias, pregones e remate que para ello hubo, vendió las dichas casas de suso contenidas e deslindadas a el dicho beneficiado Francisco Suárez en cierto precio de maravedís que por ellas se le pagaron como de la dicha escritura se declara, la cual en razón dello pasó ante… en las cuales yo, el dicho beneficiado Francisco Suárez de Encalada, como heredero del dicho mi tío sucedí como tal su heredero.
No cabe duda que el texto anterior ha resumido de manera impecable todo el relato que llevamos hasta ahora.
Y tú me das
Recapitulamos antes de seguir para poner un poco de orden.
Hablamos de casas que por un lado dan a una calleja llamada del Monje (es difícil explicar el origen del nombre, ya sea por su ubicación junto a ese previsto primer convento, ya sea por el mesón que allí había y era frecuentado por… lo cierto es que el dato no deja de ser curioso), un lugar reconocible ya que la otra calleja que hoy limita el convento era conocida como calleja que sale a la calle Palomar.
Resumiendo, que la manzana que hoy ocupa el convento y que da a la calle Real, estaría ocupada en esos momentos por dos fincas: por un lado las casas de los herederos del tal Antón Benítez y por por otro las casas del heredero Francisco Suárez de Encalada y que tras el trueque pasarían a ser propiedad del beneficiado Jiménez Franco.
Pero claro, para que haya trueque o cambio nos falta la otra parte, en este caso lo que ofrece por estas casas el licenciado García Jiménez.
Item, yo el dicho beneficiado García Ximénez Franco doy en trueque y cambio e permutación a el dicho beneficiado Francisco Suárez de Encalada e para sus herederos e sucesores e demás personas que hobieren o tuvieren causa del dicho beneficiado Francisco Suárez, difunto, así por vía de vínculo como en otra cualquier manera en lugar e por las dichas tres casas, unas principales e dos asesorias que de suso se han hecho mención, conviene a saber unas casas y corral de árboles e con todo lo que les pertenece que son en esta villa de Vllalba en la calle Real della que linda con casas de Juan Soldán e con casas del licenciado Gonzalo Hernández … e la calle que dicen del Jurado e con molino de Alonso Arias, Alguacil Mayor desta villa en las cuales…
Stop.
Aquí introducimos otro elemento curioso o casual. Es el hecho que esas casas que ofrece en el intercambio despierta nuestros recuerdos y nos remonta a años anteriores y a situaciones ya vividas..
dichas casas, yo el dicho beneficiado García Ximénez Franco sucedí e soy dueño e señor dellas por los derechos e adciones que refiere una escritura de concierto e transacción otorgada por mi e por Juan González Villaredo, vecino de la ciudad de Granada en nombre del dicho doctor Juan Pérez Manuel que pasó en la ciudad de Sevilla ante … en virtud de la cual y otros recaudos yo seguí pleito en esta villa ante la justicia della contra los bienes de Hernán Ramírez de Guzmán e doña María de Cabrera, su mujer, e sin embargo de ciertas contradicciones se pronunció auto en la causa en que se me dio posesión e amparo de las dichas casas como del dicho pleito consta que se acabó en 3 de noviembre de 1614 las cuales son libres de tributo e de otra enajenación.
Curioso. La sombra del doctor Juan Perez Manuel parece no parece que acabe de diluirse. Y por cierto , la calle del Jurado doy por sentado que todos sabemos cuál es.
Un negocio que no es un mal negocio, no
Como muchas veces pasa entre tratantes, hay una parte que gana más que la otra, que el valor del producto propuesto al cambio no es equivalente o que los intereses no son los mismos en ambas partes. Lo importante aquí es que una de las partes tiene auténtico y evidente interés por lo que posee la otra parte. Por eso apuesta fuerte para sacar adelante el trato.
porque las dichas casas que ansí os doy en el dicho trueque y cambio en lugar de las otras principales e dos asesorias a ellas tiene más valor por tener como tienen buenos edificios (…) por el dicho aumento e más valor que tienen las que yo doy en el dicho trueque y cambio os doy e pago ochocientos ducados pagados los cuatrocientos dellos luego de contado en presencia del escribano público en reales de plata y los otros cuatrocientos ducados … los doscientos ducados dellos en fin de septiembre del año que vendrá de 1615 y los otros doscientos en fin de septiembre del año siguiente de 1616.
Y ahora el meollo de la cuestión
Y ahora viene lo más importante. Hemos dejado unos puntos suspensivos en el texto anterior que ahora completamos porque ahí nuestro querido clérigo nos da todas las claves del asunto
e porque las dichas casas que ansí os doy en el dicho trueque y cambio en lugar de las otras principales e dos asesorias a ellas tiene más valor por tener como tienen buenos edificios
y estar a propósito para la intención que tengo de que sean casas dedicadas a el servicio de Dios Nuestro Señor y en ellas se pueda fundar un monesterio para que estén e permanezcan monjas profesas que sirvan a Dios Nuestro Señor e de su bendita e gloriosa Madre la Virgen Santa María
por el dicho aumento e más valor que tienen …
El acuerdo se cierra felizmente para ambas partes y el dicho beneficiado García Jiménez Franco entregó a el dicho beneficiado Francisco Suárez de Encalada, de consentimiento de los dichos Pedro Ramírez de Guzmán e doña Isabel Arias, su mujer, cuatrocientos ducados en reales de plata e quedaron en poder del dicho beneficiado Francisco Suárez de Encalada…
Una reunión ciertamente provechosa.
Conclusión
Asistimos a una manifestación irrefutable y nítida de las intenciones de García Jiménez Franco, cuatro años antes de la fundación del convento carmelita de Villalba del Alcor.
Un proyecto que sin duda se llevó madurando mucho tiempo, y la prueba es que 4 años antes de la fundación ya es una prioridad en su vida. Es consciente que los años van pasando y va ejecutando acciones dirigidas a sacarlo adelante.
Para poner en marcha y llevar a la práctica una idea tan ambiciosa (quiero pensar que fundar un convento lo es) nuestro licenciado fundador contó con dos elementos que con toda seguridad fueron esenciales en el éxito final del proyecto.
- Una mentalidad y un pragmatismo basado en la experiencia y en la tradición familiar.
- El apoyo de una extensa y bien posicionada familia. Una familia que contribuyó en el arranque y en la continuidad de todo el plan. Y los Encalada forman parte de esta amplia parentela.
Pienso que el convento podrá haberse construido en cualquier otro lugar, en cualquiera de las muchas propiedades que pertenecían a este rico hombre (solo hay que prestar un poco de atención a cómo se desenvuelve en la gestión de su patrimonio) pero quizás su carácter práctico o el diseño de este programa fundacional lo llevaran a tomar estas decisiones.
Y también, ¿por qué no? el caso del matrimonio Pinto-Suárez fue una buena piedra de toque que sirvió a nuestro presbítero beneficiado Ximénez Franco para tomar nota sobre sus futuras actuaciones y decisiones en el proyecto que, finalmente, culminaría con la fundación de otro convento femenino.
En este caso, sí que sí, podemos catalogarlo como un verdadero caso de éxito.
Temas de Historia
Biografías – Instituciones religiosas – Villalba y América – Urbanismo – Tradiciones – Historia de España – Opinión
¿Quieres estar al día de todo lo que publico?
Para estar informado de las actualizaciones y publicaciones de Gadeas